viernes, diciembre 01, 2006

Cuando la basura nos alcance


Deshacerse de la basura parece un problema resuelto por el espacio aparentemente infinito de los tiraderos, pero un mal tratamiento de los desechos los convierte en una bomba de tiempo. Sólo 9 estados tienen una planeación adecuada de instalaciones para la disposición final de los desechos. Cuernavaca es hoy, un ejemplo real de lo que podría ocurrir a cualquier ciudad del país si no toma en serio este asunto.

Texto y foto:
Claudia Altamirano

Tener un restaurante de mariscos frente a un contenedor de basura no representó nunca un problema para la señora Keiko de Avilés, hasta que el contenedor se perdió de vista, sumido en un cerro de bolsas llenas de desechos. A más de un año de haber puesto su negocio a un costado de la autopista del Sol, en la ciudad de Cuernavaca, jamás había visto tanta basura junta ni tanta clientela perdida. El olor es tan fétido, que sus ventas han bajado a más de la mitad.

El depósito conocido como El Polvorín, ubicado sobre la autopista y junto a un módulo de atención turística de Caminos y Puentes Federales, se convirtió en una montaña de basura acumulada desde 20 días atrás, cuando los camiones recolectores dejaron de llevársela. “El dolor de cabeza no se nos quita”, exclama la señora Avilés. “Empezamos a tener moscas y cucarachas, diario fumigamos, pero no se acaban y no podemos estar encerrados tampoco, se nos encierra el olor”.

Para evitar que las ratas entren a su local, Consuelo García, dueña de una tienda de abarrotes próxima al contenedor, ha colocado pan envenenado en la banqueta. Es lo único que puede hacer, tras haber perdido todo lo que invirtió en un pequeño local de jugos y tortas, que estaría a un lado de la tienda y sería inaugurado 20 días atrás, justo cuando la basura empezó a acumularse.

Martín, el encargado del contenedor, porta un cubrebocas para soportar las horas que tiene que pasar en ese lugar, aun siendo pepenador. “Ya no deberiamos recibirla, pero la gente no entiende que ya no cabe, vienen y tiran sus bolsas... Luego quieren hasta golpear a uno... Se enojan. No podemos ni sacar el material para venderlo, porque al romper las bolsas, con el viento se regaría la basura y el olor”, lamenta.

Otro vecino del restaurante es el odontólogo José Eugenio Brito, quien se ha visto obligado a rentar otro local para atender a sus pacientes en la avenida Plan de Ayala. “Yo cierro por higiene. Estoy aquí por obligación pero no puedo dar consulta, no puedo tener a los pacientes con la boca abierta aquí. Se me estan viniendo todas las moscas”.

Estos empresarios son un ejemplo de lo que vive la capital morelense: las consecuencias de un mal manejo de los desechos y un desinterés total de las autoridades por resolver un problema viejo pero creciente, al que sólo atienden cuando lo importante se ha vuelto urgente.

La ciudad de la “eterna primavera” es un botón de muestra de que la basura puede ser una fuente de empleo e ingresos importantes, o un grave problema ambiental y de salud, según el tratamiento que se le de. De acuerdo con la investigadora del Instituto Politécnico Nacional, Rosa Laura Meraz, en México hay tres tipos de sitios para disposición final de desechos: El basurero a cielo abierto sin ningún control; el basurero controlado, que es un banco de materiales donde se compacta y cubre la basura con tierra; y el relleno sanitario, obra de ingenieria con sistemas de captación de biogas y lixiviados (líquidos producto de la basura orgánica).

Según reportes de autoridades estatales, recabados por la Secretaría de Medio Ambiente (SEMARNAT), existen 650 tiraderos a cielo abierto y alrededor de 200 sitios controlados, de los cuales sólo nueve “se acercan” al cumplimiento de la norma ambiental: Monterrey, Torreón, Tlanepantla, Mérida, Querétaro, Nuevo Laredo, San Juan del Río, Nogales y Durango.

Esto significa que, de 32 estados que conforman el territorio nacional, 23 no han realizado la adecuada “selección del sitio, diseño, construcción, operación, monitoreo, clausura y obras complementarias de un sitio de disposición final de residuos sólidos urbanos y de manejo especial”, que exige la NOM-083-SEMARNAT-2003, por lo que corren el riesgo de, eventualmente, padecer conflictos logísticos y sociales derivados de un mal tratamiento de su basura, similares a los que vive hoy la ciudad de Cuernavaca.

“La disposición de los residuos tradicionalmente ha sido en tiraderos a cielo abierto, que causan muchas molestias y contaminan”, reconoció Jorge Hinojosa, secretario ejecutivo de la Comisión Estatal del Agua y Medio Ambiente de Morelos; estado que se ubica en el grupo de los que más basura producen en todo el país: el 63 por ciento de los desechos a nivel nacional se generan en la zona centro, integrada por Aguascalientes, Colima, Guanajuato, Hidalgo, Jalisco, México, Michoacán, Morelos, Puebla, Querétaro, Tlaxcala, Veracruz y el Distrito Federal.

De dichas entidades, sólo Querétaro y el Estado de México cuentan con un relleno sanitario adecuado. Destaca que en Querétaro existan dos rellenos de este tipo, siendo que durante 2005 produjo sólo 504 mil toneladas de basura, mientras que los mexiquenses produjeron 5 millones, 902 mil toneladas en ese mismo año, teniendo sólo un relleno en regla.

Los focos rojos, por el número de toneladas de desechos que generan contra el número de rellenos adecuados, son: el Distrito Federal, que en 2005 produjo 4 millones, 550 mil toneladas; Jalisco, que en el mismo periodo generó 2 millones 482 mil toneladas; Veracruz, con un millón 927 mil toneladas; Guanajuato, con un millón 584 mil toneladas y Puebla, con un millón 548 mil toneladas. Resalta el caso del Estado de México, que siendo el mayor productor de basura en el país (5 millones 902 mil toneladas durante el año pasado), cuenta con un solo relleno en regla; y su tiradero más recurrido –el Bordo de Xochiaca- procesa sólo un 20 por ciento de sus residuos.

Tetlama: la discordia

Los habitantes de Tetlama, un municipio ubicado a 30 kilómetros de Cuernavaca, bloquearon el acceso al gran basurero del mismo nombre, cansados del paso diario de más de 50 camiones por su avenida principal, que en el trayecto regaban basura, esparcían la peste y quebraban el pavimento, dejando grietas y hoyos por todo el camino.

Los conductores de los recolectores, indiferentes al bloqueo –pues siguen percibiendo un salario del ayuntamiento-, decidieron no recoger más basura hasta que se abra el acceso, al no haber dónde depositarla ni camiones para transportarla. En el punto de transferencia de El Polvorín, una mina cercana a la ciudad que sirve como encierro para los recolectores, ya no cabe un trailer más: todos están estacionados y rebozantes de basura, en espera de un sitio a donde llevar su carga.

En Tetlama, los pocos pepenadores que permanecen ahí se quejan de quienes bloquearon el paso al basurero, excepto Hipólito García Ramírez, quien reconoce que, en este problema, el único irresponsable ha sido el gobierno de Morelos. “Yo trabajo aquí, yo me beneficio del tiradero, pero no por eso voy a dejar de ver que el gobierno no quiere tratar la basura, quiere venir y botarla aquí y ya”, acusa.

Aunque acepta que su fuente de ingreso se ve afectada con el bloqueo, Hipólito -quien posee una planta aplanadora de PET que le permite vender más-, confiesa que los pepenadores podrían vivir de otra manera, trabajando en otra cosa. “Muchas veces la gente que trabaja en la basura se aferra a ella porque no quiere que nadie la mande, aquí cada quien hace lo que quiere y llega a la hora que quiere, la gente ya se acostumbró a esa manera de vivir, pero de que no haya trabajo, eso es totalmente falso”, admite.

Carente de estudios pero con un mundo de experiencia, Hipólito plantea una solución integral al problema de la basura, idéntica a la solución planteada por la maestra Meraz, del IPN. “Quieren poner basureros pero sin los estudios pertinentes. Si tuvieran todo separado no se les incendiaría, pero aquí vienen y tiran todo parejo. La solución es que el gobierno busque un lugar pero bajo la norma 083: buscar un terreno con sus celdas, sus canaletas de lixiviados, sus tubos de biogas... y para eso no se necesita mucho dinero. La basura es un problema que se les está yendo de las manos”, sentencia.

Por su parte, la maestra Rosa Laura Meraz, especialista en gestión integral de residuos, coincide con Hipólito al señalar que, la única forma de evitar que otra ciudad se inunde de basura, es crear rellenos sanitarios con celdas, una geomembrana, los desechos compactados y cubiertos de tierra; con pozos de captación de biogas y de lixiviados.

Separación, esfuerzo insuficiente

Los esfuerzos del gobierno, indicó la investigadora, deberían dirigirse a buscar otras alternativas, pues la separación entre orgánico e inorgánico, a pesar de ser útil, aun es insuficiente. Es necesario fomentar cada vez más, recalcó, el reciclaje, el composteo y la incineración, pues hasta hoy es muy poco lo que se recicla -de 14 mil toneladas de basura que se producen en el DF al día, solo 2 mil se quedan en las plantas de separación- y hay muy pocas plantas de composteo (solo la Central de abasto produce 900 toneladas al día de residuos orgánicos).

En el fondo de esta problemática, asegura la investigadora, hay una solución viable y una fuente importante de empleos y dinero. De tratarse adecuadamente, la basura generaría grandes ganancias al reciclarse y trabajo para quienes se ocupen de ello, amén de librar a todos de sus desechos sin que estos se desborden y provoquen conflictos sociales, como los de Morelos. En contraste, otros estados explotan en su beneficio los tiraderos de basura, como Nuevo León, donde los gases emitidos en los basureros son utilizados para generar energía eléctrica; lo cual puede ser muy rentable si se considera que una tonelada de residuos produce 107 metros cúbicos de metano.

A fin de evitar que otras ciudades se vean invadidas por sus propios desechos, el titular de medio ambiente de Morelos recomendó a los estados en riesgo trabajar en los sitios de disposición, cumpliendo con la normatividad y buscando el consenso local; tratar de llevar beneficios a la población en lugar de perjudicarlos. “Hay dinero, hay empleo, convencerlos de que bien manejado, más que perjuicios trae beneficios. (...) Pensamos que la cuestión del medio ambiente nunca nos iba a alcanzar, pero esto hay que verlo ya”.

Venganza virtual


Amantes despechados, ex parejas abandonadas y personas solitarias que disfrutan de perturbar a los demás disfrutan hoy del medio ideal para vengarse simbólicamente: la Internet, que además, les brinda la facilidad y libertad del anonimato. La ley no contempla castigo alguno para el acoso cibernético, pero no todo está perdido.

Claudia Altamirano

En este tiempo moderno en que la delincuencia se pone a la vanguardia utilizando la tecnología para extorsionar, robar y amenazar, entre otros ilícitos, recibir llamadas de desconocidos que preguntan por un anuncio de Internet puede provocar la paranoia de cualquiera. Tras varias llamadas en las que preguntaban su nombre e insistían en saber sobre un anuncio de Segundamano, Carmina pensó en llamar a la policía, pero se le ocurrió revisar antes el sitio web de dicha publicación, para comprobar si el anuncio en cuestión existía o no.

Cual sería su sorpresa al encontrar, efectivamente, un anuncio con su nombre, número de celular y una tarifa, seguida de una leyenda que ofrecía, de manera implícita, servicios sexuales. Indignada, Mina decidió poner una denuncia ante el Ministerio Público por difamación, pues el anuncio era la cereza del pastel: desde meses antes, alguien se había dedicado a enviarle mensajes anónimos a través de su página personal (blog), donde siempre escribía ofensas para ella y su familia.
Como era de esperarse, Carmina tuvo que peregrinar por diversas instancias policíacas para obtener una respuesta, que al final, fue negativa; pues el único delito por el que podían perseguir a quien la acosaba, era el de difamación, mismo que fue derogado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal en mayo pasado. Así, la demanda de Carmina no pasaría de una mera denuncia de hechos, teniendo como único recurso la demanda civil en un tribunal, donde, en caso de ganar el juicio, obtendría una indemnización por parte del difamador no mayor a 18 mil pesos.

El caso de Mina ilustra otro de los usos que ésta generación da a la tecnología en materia de telecomunicaciones; donde la red de Internet y la telefonía celular, con todos sus recursos, permiten a amantes despechados, ex parejas abandonadas y personas solitarias que disfrutan de perturbar a los demás, vengarse simbólicamente, al difamar al objeto de sus rencores en un medio público.

Y si el delito de difamación ya no tiene repercusiones penales sino solo civiles, pareciera que la impunidad del atacante está asegurada, pues un civil común que perciba un ingreso medio, acabaría perdiendo más dinero en abogados y trámites que los 18 mil pesos que el acusado le pagaría, en caso de resultar culpable; amén del tiempo que también perdería y la burla de que sería objeto al presentar una demanda por algo que parece tan simple, pero que en realidad podría provocar a la víctima un despido de su empresa o un conflicto grave con su pareja o familiares.

Empero, la red tiene recursos no por todos conocidos que permiten encontrar a quien difama o acosa ocultándose tras su computadora. Si bien el descubrirlo no tendría una repercusión legal, permite a la víctima, al menos, identificar a su agresor para poder tomar alguna medida al respecto. Así, con la ayuda de un empleado de Segundamano, logró ubicar a la empresa desde la cual se emitían los mensajes, concluyendo con ello que su agresor era la pareja de un antiguo novio suyo.

Del mismo modo procedió Ernestina, cuando la ex novia de su actual pareja emprendió toda una batalla virtual en su contra, enviándole correos electrónicos sumamente ofensivos desde varias cuentas, incluyendo la de su novio. Tina había optado por ignorar estos mensajes, hasta que recibió 31 de ellos en un solo día; lo que la motivó a responder, pidiendo que la dejaran tranquila pero logrando el efecto contrario: los mensajes se incrementaron en el correo e iniciaron vía teléfono celular, llegando a enviar hasta 28 en un mismo día; protegida nuevamente por el anonimato, pues enviaba los SMS a través de Internet.

Cansada de este acoso, Tina recurrió al mismo método para ponerle fin: reenvió todos los mensajes de Laura Bolaños, su agresora, a un grupo de amigos de ésta última, logrando ridiculizarla por esta pueril acción y cesando así los correos electrónicos. Y aunque Laura siguió hostigando a Tina por otros medios más directos, ya no pudo resguardarse en el anonimato de la red.

Para defenderse del acoso cibernético se puede recurrir a la respuesta directa -cuando se conoce al emisario de los mensajes-, la cancelación de páginas personales o cuentas de correo, o la búsqueda de la dirección IP de la máquina desde la cual fueron emitidos los mensajes; lo que puede lograrse con un software especial o con la ayuda de un hacker que localice ésta dirección y la red a la que pertenece.

Pero si la víctima de difamación quiere tomar medidas legales para detener estos ataques, debe tener paciencia y bajas expectativas, pues el proceso es largo y podría no rendir frutos, al menos en el Distrito Federal, donde la difamación ya desapareció del Código de Procedimientos Penales.

La odisea empieza en el Ministerio Público, donde decidirán si existe o no algún delito que amerite la indagación, en cuyo caso se solicita a la Subdirección de especialidades concentradas de la Procuraduría capitalina que investigue, a través de sus peritos especializados en informática, la dirección IP de la máquina de la cual salieron los anuncios o mensajes. Una vez que ésta subdirección entrega el resultado, el MP puede pedir a Teléfonos de México o la empresa relacionada con las redes, que indique a quien pertenece esa máquina, para así determinar un posible responsable.

A nivel federal, también existe una instancia que cuenta con todos los recursos para detectar a estas pesadillas virtuales, aunque existen grandes limitantes para que un ciudadano común goce de este servicio. La Policía Cibernética de la Policía Federal Preventiva (PFP), es un órgano dedicado a investigar los delitos cometidos en Internet, empero, en el caso del acoso o difamación, no tiene injerencia alguna; pues aunque a nivel federal no ha sido derogado el delito de difamación, para que el hecho trascienda al nivel federal debe haber indicios de delincuencia organizada. De no ser así, el caso no podrá salir del ámbito local, donde, al menos en la capital, ni siquiera hay delito que perseguir.

Este enredo jurisdiccional es uno de los límites de la investigación en esta materia, como lo reconociera el mismo procurador general de la República, Daniel Cabeza de Vaca en junio pasado. Durante un congreso internacional sobre cibercriminalidad, el procurador señaló que la definición de las figuras y la competencia son las principales debilidades en materia de legislación, pues es difícil determinar la ubicación exacta de la persona que comete el delito y esto genera una confusión de competencias. Cabeza de Vaca reconoció, además, que en México "estamos en pañales" en materia de regulación de delitos cibernéticos, consolándose en la idea de que "en todo el mundo hay que avanzar mucho todavía"; pese a que en España, por ejemplo, la sección de delitos tecnológicos de la policía atiende e investiga estos hechos igual que las extorsiones, las redes de pornografía infantil o los fraudes cibernéticos.

De manera que lo único que el procurador puede hacer al respecto, hasta ahora, es recomendar a los usuarios de Internet que tengan cuidado, "porque la verdad es que el Internet y la computadora implican un anonimato que no sabe uno en realidad quién está del otro lado". Advirtió, además, que los peligros del contacto en la red pueden ser algo más que una molestia, "cada día son más los casos que hemos sabido, que conocen, analizan, estudian a la víctima por medio de los chats, de los famosos grupos de conversación, los foros, entonces sí hay que tener cuidado", indicó el funcionario durante la conferencia.

En este contexto, no es exagerado recomendar el uso de todas las medidas de seguridad posibles, como filtros en el correo electrónico, firewalls, establecer contraseñas difíciles de adivinar y restringir los comentarios anónimos en las páginas personales o blogs; ya que la mayoría de los espacios públicos de expresión y contacto no cuentan con medidas punitivas para quien haga un mal uso de ellos. Asimismo, es recomendable hacer caso omiso de las invitaciones de personas no conocidas y, por ningún motivo, facilitar datos personales a través de los sistemas de mensajería instantánea.

Y, en caso de haber sido víctima ya del acoso de alguien que busque una venganza virtual, las posibilidades se limitan a buscar al agresor con la ayuda de un experto en informática, para así poder encararlo, o establecer una demanda civil en un tribunal.

Celebrar a México (15 sept)


Entre tantas banderas, tequila, pozole y desfile, vale la pena hacer un espacio para los mexicanos que no sólo celebran en septiembre, sino que buscan, todos los días, hacer de este un país mejor.

Claudia Altamirano

"La felicidad es una decisión", reza uno de los carteles colocados en las paredes del salón donde las chicas realizan la práctica que les asignaron. Imelda suelta el lápiz para acomodar a su bebé, a quien amamanta. Otra de ellas cuenta, aliviada, que su madre tiene seguro médico e inscribirá a su nieta como si fuera su hija. "De todos modos yo le voy a comprar sus cositas, gano bien", dice, contenta por su nuevo trabajo de mesera.

Ellas viven en SEDAC (Servicio, educación y desarrollo a la comunidad), la casa hogar que recibe a jovencitas embarazadas o con hijos pequeños pero sin recursos; donde se les capacita y enseña a formar un proyecto de vida que evite que acaben en las calles o, en algunos casos, que regresen a ellas.

El taller fue creado por Carma Aguilar, una comunicadora que, desde hace tres años, ayuda a las chicas de Sedac a regularizar sus documentos oficiales, inscribirse en la escuela, capacitarse para el empleo; trabajar en su autoestima, emprender un proyecto de vida independiente y, finalmente, concretarlo.

Haciendo honor a su nombre, Carma ha dedicado el último lustro a la labor social voluntaria, lo mismo ayudando a niños en Casa Alianza que impartiendo cursos de desarrollo humano en el Instituto de la Mujer; pero hoy, Carma se niega a dejar a "sus niñas", a quienes ayuda a encontrar sus habilidades para volverse independientes y útiles para la sociedad.

A pesar de que Carma recibe una sencilla beca que le permite sortear algunos gastos mientras imparte este taller, su trabajo es esencialmente voluntario. Lo más importante, dice, es que al ayudar a unos pocos se mejora todo el entorno, pues ellos aprenderán a ayudar, a su vez, a otros que lo necesiten.

Para lograr un cambio profundo en la población, Carma sugiere atender a la parte humana de quienes cuentan con pocos recursos, y no solo procurar su alimentación, sustento y educación. "Todo mundo ve a un niño de la calle y le quiere dar dinero, pero ¿Qué pasa con la parte espiritual? Esa parte es la mas descuidada y necesitada, el ponerle atención a una persona es lo que puedes aportarle, más que lo económico".

La diferencia

Es precisamente esa parte humana la que rara vez se puede apreciar en un policía. El mal desempeño de muchos ha derivado en un desprecio generalizado de la ciudadanía hacia ellos, aunque la actuación de algunos invita a no juzgarlos a priori.

El pasado 2 de agosto, en el paso a desnivel del cruce de Viaducto y Revolución, una camioneta quedó atrapada en la gran inundación con granizo que afectó la capital esa noche, obligando a los pasajeros a subir al toldo del vehículo para salvarse. Una llamada de auxilio hizo que el Segundo Oficial Eduardo Espino solicitara el apoyo de los bomberos para el rescate, pero el tráfico provocado por la lluvia era tal, que el oficial tuvo que actuar antes de que el agua helada alcanzara a los hombres atrapados.

Con ayuda de unos cinturones de arrastre, Espino y su compañero, Rodolfo Bolaños, impulsaron hacia el puente a los automovilistas, logrando dejarlos a salvo. En un momento en el que muchos sólo hubieran esperado la llegada de los bomberos, éstos policías hicieron, simplemente, "lo que tenían que hacer".

"Cuando uno asume la responsabilidad de servir y con lo que tiene a su alcance, toma decisiones; de alguna manera uno tiene idea de qué hacer y se toman las decisiones pensando en la seguridad de ellos y también de uno, porque tampoco es válido hacerle al héroe. Había que hacer cosas (…) bien y rápido", señaló el oficial.

Aunque la situación podía empeorar si las víctimas sufrían de pánico y se agitaban al momento de subirlos, pues podían caer o arrastrar consigo a alguno de los policías, Espino y Bolaños asumieron el riesgo por salvar a esas personas de la hipotermia o el ahogamiento.

"El tomar decisiones es lo que hace la diferencia. Yo soy de las personas que si ve una situación, inmediatamente decido qué se va a hacer. Para mí quedarse cruzado de brazos no es tomar decisiones, para mí es actuar, pero con responsabilidad. Yo creo que todos tenemos la capacidad de hacerlo, pero a veces pensamos mal las cosas", expresó.

"Yo creo que con un pequeño esfuerzo que hagamos todos los servidores públicos, hacemos grandes cosas, siempre y cuando estemos dispuestos a hacerlas. La mejor recompensa que puede tener es saber que su trabajo sirvió de algo, no tiene precio".

"Devolver un poco de lo que tengo"

La gente que vive en las calles, en los barrancos, las vías del tren, suelen crear mitos en los demás sobre lo que significa vivir ahí. Pero hasta que se les conoce, se puede tener una mejor idea al respecto. Esto lo sabe Laura Salinas, una chica de 22 años que, tras estudiar diseño en Bellas Artes, optó por hacer trabajo voluntario en Christel House, organización civil que proporciona gratuitamente educación, alimentación y salud a niños de bajos recursos, particularmente de los llamados "cinturones de miseria" de Santa Fe.

Aunque inicialmente apoyaba durante unas horas en tareas administrativas, fue requerida después para apoyar a los trabajadores sociales que aplican estudios socioeconómicos en la zona, que determinen quienes requieren más del servicio de Christel House. Al ingresar a esas casas, su impresión fue tal, que decidió dedicar 9 horas de su día a esos niños.

"No llegue aquí con el fin de ser voluntaria, sino que me envolvió la institución; visitando las casas de los niños me engancharon… Te das cuenta de que realmente tienen muchas carencias, algunos ni siquiera tienen agua, drenaje, luz… ves problemas de desnutrición, abuso, abandono… cada uno trae su historia", relata.

El conocer de cerca estos problemas generó un sentido de responsabilidad en Laura, quien siente que es su deber elegir a los niños que más necesitan la ayuda de Christel House. "A lo mejor no les doy dinero ni les llevo comida, pero sí les estoy dando su lugar aquí y no se lo doy a otro que sí tiene todos los recursos".

Esa es su forma de contribuir a que México tenga un mejor nivel educativo y social, al otorgar a niños sin recursos la posibilidad de contar con estudios más avanzados de lo que sus padres pudieron tener y, así, tener mayores oportunidades que ellos. "Ahí siento que estás impulsando a que subamos todos juntos. Ya tienen más armas que darle a los demás, a sus hijos, ya tienen el impulso para hacer algo más grande e ir más lejos".

Con ello, Laura busca devolver a la vida un poco de lo que le ha sido dado, y coincide con Carma Aguilar en que la voluntad de ayudar es expansiva: "Aquí puedes ayudar a que estos niños aprendan a ayudar a los demás, es una cadena, (…) te sensibiliza a querer ayudarnos todos. Nos hace fuertes el trabajo en equipo".

"Por puritito amor al arte"

Uno de los rubros más olvidados por los gobiernos en México es la cultura. Por no tratarse de una necesidad primordial, queda relegada en recursos e importancia, aunque para algunos, como Alberto Mora, sea tan necesaria como la educación, pues "una persona con cultura, ama a su patria".

Fotógrafo y artesano, Alberto siempre se interesó en la labor social y el altruismo, pero la fuente de inspiración para la labor que realiza hoy en día, la encontró en una observación de su hijo. "Por qué el teatro está tan vacío, papá?", preguntó el niño, detonando en Alberto la voluntad de llenar de espectadores los teatros y foros culturales, acercando a todo tipo de personas a la cultura.

La iniciativa se convirtió en el proyecto "Boletitos", que cumple ya cinco años y ha regalado miles de entradas a niños de la calle, punks, profesionistas, amas de casa, seropositivos, prostitutas y todo el que quiera acercarse a la cultura a través de esta oportunidad única.

"Me da tristeza porque somos un pueblo muy inculto y la falta de cultura es una forma de manipular a las masas. Los gobiernos, que sí tienen todos los recursos, no hacen nada, y nosotros hacemos todo sin dinero. Queremos hacer excelentes espectadores que amen la cultura", expresa Alberto, quien hace algunos meses regaló casi tres mil entradas para el espectáculo Snowshow, del payaso ruso Slava.

Con la única intención de acercar a más personas a la cultura y permitirles vivir experiencias enriquecedoras a través del arte, Alberto Mora y su mujer, Alicia, se mantienen en contacto con distribuidores, productores, promotores y protagonistas de las obras y los foros, a quienes piden cortesías que después obsequian. Ellos creen en la cultura como un medio para lograr una mejor sociedad, al hacer de cada ciudadano una mejor persona.

El artesano lamenta el infortunio de haberse topado con personas que lucran con los boletos que se les obsequian, pero no margina ni relega a nadie que pida entradas, ni siquiera, a quienes tienen un buen nivel económico. "Todos tienen derecho a ver y escuchar arte. Nosotros hoy tenemos como 30 pesos para comer, y a veces me han dicho 'no seas güey, vende los boletos', pero no, no, no. Esto es por puritito amor al arte".

Asumir la muerte


-En memoria de la Mtra. Alicia Mendoza.

Llegar a aceptar la muerte –propia y ajena- como algo normal es imposible, pero la mayoría lo supera con tiempo y apoyo familiar. Para quienes el duelo parece insuperable, existe una segunda opción: la tanatología, que enseña cómo vivir tras la muerte de un ser querido o tras haber sido desahuciado.

Texto y foto: Claudia Altamirano

Un diagnóstico de cáncer que no va acompañado de muchas esperanzas de vida es algo tan trágico, que quien lo recibe empieza a morir anímicamente desde ese momento. Para una mujer como Alicia, inquieta, independiente, vanidosa y siempre muy alegre, el tumor en su garganta significó el fin de la vida que conocía hasta entonces, para dar paso a la dependencia, el encierro, el silencio, la depresión.

Maestra de biología en todos los niveles educativos, Alicia trabajó hasta el 25 de enero pasado, pues el tumor, descubierto apenas en octubre de 2005, sería extirpado en febrero. A partir de entonces, la obvia protección de su familia la cercó: no puede decidir sobre su ropa, su comida ni sus horarios. Su aspecto también cambió, ha reducido dos tallas y su voz, que fue siempre su instrumento de trabajo y su pasión, sale con mucha dificultad.

"Entre las muchas cosas que se piensan, a veces pensaba que podía ser un reclamo de la vida por algo... en mi caso yo pensé que mi exceso de vanidad y el ser tan libre y no detenerme ante nada", confiesa la maestra, quien, a petición de su hermana, inició un tratamiento tanatológico que le ayudara a asumir su enfermedad.

"Junto con el doctor he llegado a la conclusión de que la vida es un ciclo que se puede terminar en cualquiera de sus etapas. Que no necesariamente tener esta enfermedad es un castigo, que tampoco hay que padecerla como un estigma sino tomarla como la oportunidad que nos dan para concluir lo que podíamos tener por ahí", señala Alicia.

Y es que aceptar la muerte –propia y ajena- como algo normal es imposible, pero aprender a vivir con ello puede requerir de ayuda profesional. De acuerdo con Mario Guerra, presidente de la Sociedad Española e Internacional de Tanatología de México, el 62 por ciento de las personas que sufren una pérdida podrán superarlo con tiempo y apoyo familiar, pero el otro 38 por ciento, por su circunstancia particular, requerirá un tratamiento tanatológico.

Del griego tanathos, la tanatología es la ciencia que estudia la muerte y el objetivo de su terapia es "que el evento doloroso de la muerte sea amortiguado por un proceso de aceptación de un ciclo natural de la vida"; evitar que el duelo se convierta en una sicopatología y permitir, en un tiempo razonablemente corto, la reintegración a una nueva vida.

Son candidatos a este tratamiento quienes desarrollan relaciones co-dependientes o apegos excesivos, así como relaciones ambivalentes (donde en un momento se llevan muy bien y en otro muy mal), pues se desarrollan culpas por los malos momentos, que no dejan llevar a cabo el proceso de forma sana. También pueden requerir ayuda quienes sientan culpas excesivas alrededor de la persona fallecida o en los casos de muerte repentina y trágica.

Sin embargo, esta terapia no sólo es aplicable en casos de muerte, sino a cualquiera que haya sufrido una pérdida, ya sea de un familiar, una mascota, una casa o un miembro del cuerpo, "cualquier pérdida que genera alguna angustia o estrés, puede recibir tratamiento tanatológico", señala el presidente de la SEIT en México.

Duelo complicado
A decir del doctor Guerra –quien actualmente atiende a Alicia-, un proceso de duelo normal puede llevar de uno a dos años pero es variable: si fue muerte natural, un año, si fue muerte repentina, dos años y si se conjuntan varias agravantes, hasta 3 años. Después de ese periodo, se habla de un duelo que podría derivar en patologías, por lo que requiere de este tratamiento.

"Un duelo no sano es cuando, después de un año de la muerte, el deudo sigue recordando al muerto como el primer día. Sigue hablando de él y el llanto sigue descontrolado o no puede ni mencionar su nombre, etc. La terapia es para que el deudo aprenda a vivir en un mundo donde el otro está ausente. A recolocar emocionalmente al fallecido, es decir, que ya no lo percibas como algo externo, sino algo que ya vive dentro de ti".

Guerra advierte que un tratamiento tanatológico debe iniciarse después de un mes del fallecimiento, pues intervenir en el duelo de las personas antes, puede ser contraproducente; además de que debe ser voluntario, nunca forzado.

El tanatólogo puede detectar, tras un plazo de seis meses después de la muerte, si ese proceso de duelo es normal o no, basándose en los predictores de duelo complicado: que muera el sostén o la pareja de un adulto mayor; muerte de la madre para un menor (de 11 años en el caso de una niña, 18 años en el caso del niño); ausencia de cadáver; muerte accidental y/o repentina y cruenta; que los deudos sean mujeres solas con niños pequeños.

En esos casos, se debe aplicar una terapia que consiste, básicamente, en 4 etapas: aceptar la pérdida, expresar las emociones por cualquier vía (llanto, rabia, aislamiento, silencio), recolocar emocionalmente al fallecido (interiorizarlo, no verlo más como algo externo) y finalmente, aprender a vivir en un mundo donde el fallecido está ausente.

"No se trata de simplemente hacer llorar, porque no todas las personas reaccionan igual (...), puede ser contraproducente", precisa el sicólogo. "Cuando un miembro de la familia que sufrió una pérdida no llora, no es recomendable obligarlo a llorar, nunca funciona. Lo recomendable es solicitarle su apoyo, que todos hablen de su dolor y el otro, de forma natural, empezará a expresar sus emociones, cuando identifique su dolor con el de los otros".

Educar para la vida y para la muerte

Para lograr una mejor superación de una pérdida, señala la SEIT, se debe educar en la vida y en la muerte, por lo que se debe abordar este tema con los niños sin mentir ni crear fantasías al respecto. Para tener un concepto sano de muerte, indica Mario Guerra, debemos comprender el concepto de universalidad (todos morimos, hasta mis seres queridos), el de que la muerte no es lineal (pueden morir niños o ancianos) y que es definitiva e inevitable; "pero hacer que esto sirva como un motor para vivir mejor la vida".

¿Es posible llegar a ver la muerte de una forma natural y no trágica?

"No, el ser humano ve a la muerte como algo ajeno, externo y agresivo. Todos tenemos miedo naturalmente a morir. La emoción se instala. Cómo reaccionas ante ello, ésa es la diferencia. El duelo es un proceso, no un estado; no 'estás' en duelo, estás llevando un proceso de duelo".

Así como la tanatología enseña a llevar una nueva vida sin la persona que falleció, a quienes han sido desahuciados o tienen pocas esperanzas de sanación, se les ayuda a vivir una nueva vida con su enfermedad, donde son personas distintas que no deben obsesionarse con volver a ser como fueron antes.

"Aspirar a volver a la vida de antes es algo utópico, porque ya perdiste una parte, tienes que volver a reestructurar, replantearte, pero para eso tienes que replegarte, quedarte un poco atrás y ver como está el panorama, reposar un poco la pérdida y entonces replantear las cosas; porque la muerte te tumba todo, te tira tu mundo de constructos, de certezas, la muerte lo cambia todo".

La nueva Alicia

De esta manera, a pesar del corto tiempo que ha llevado su terapia, Alicia ha asumido su nueva vida y se muestra dispuesta a vivirla: "Quiero aprender a ser 'ésta' Alicia, con esta cara, con este cuerpo debilitado. Tengo todos mis recuerdos pero no me lastiman, yo veo mi vida pasada como un regalo. Ahora soy la segunda Alicia", sentencia.

La maestra, de 60 años, reconoce que fue hasta que enfermó, cuando se dio cuenta de lo feliz que ha sido durante toda su vida; con una familia que la apoya, alumnos que la reconocen y aprecian y un esposo que, pese a haber llegado a su vida hace apenas 5 años, ha sido "su ángel". Ahora, ha aprendido a esperar, y desea tener tiempo suficiente para agradecer a todos los que la han cuidado, "pues hay gente que muere sola".

Alicia no sabe si su enfermedad avanzará o si podrá superarla, pero "si la libra", dice, escribirá un libro. En tanto, se siente tranquila "y quiero que ese momento llegue así, tranquila".

http://www.eluniversal.com.mx/primera/27140.html

La credencial universal que nunca llegó

La posibilidad de tener una credencial única que sirviera para identificarse, realizar trámites oficiales, pagar impuestos y hasta recibir remesas del extranjero, se extinguió una vez más por la renuencia de las instancias afectadas, que al no aprobar este proyecto a tiempo, lo dejaron a la voluntad del siguiente gobierno.

Claudia Altamirano

Credencial para votar. Registro Federal de Causantes. Número de seguridad social. Licencia para conducir, tarjeta Tributaria, cédula profesional... todos trámites separados, de diferentes instituciones y con credenciales individuales. Una iniciativa presentada en comisiones del Senado pretende unirlos a todos en una credencial oficial que permitiera, a través de un número único de identidad, realizar cualquier trámite con un solo documento universal.

Esta credencial es ya de uso común en los Estados Unidos, donde el carnet de seguridad social sirve como identificación oficial para realizar trámites bancarios, cobrar salarios, rentar autos y expedir otros documentos oficiales. En el caso de México, el proyecto de credencial universal prevé que a través de ella se pueda también recibir remesas, pagar impuestos, solicitar facturas y acceder a servicios de salud. Todo con un solo plástico digitalizado.

Empero, este proyecto de simplificación administrativa, que ha intentado concretarse varias veces en el pasado, perdió una batalla más en este sexenio, al no poder convertirse ni siquiera en un dictamen. La renuencia de las instancias para dejar toda la información de los ciudadanos en manos del Registro Nacional de Población, dependiente de la Secretaría de Gobernación, canceló esta posibilidad.

Con el último día de trabajo de la LIX Legislatura del Congreso, se desvaneció la posibilidad de que esta iniciativa subiera a la tribuna del Senado para su discusión, pues ni siquiera al interior de la comisión de Población y Desarrollo hubo consenso entre los partidos para presentarla y convertirla en dictamen.

El más reciente intento para llevar a cabo un proyecto similar fue la adopción de la Clave Única de Registro de Población (CURP), cuyo acuerdo fue publicado en octubre de 1996 y que pretendía otorgar a la ciudadanía una llave única con la que pudiera identificarse en todos los registros de población.

El solicitante no recibía credencial oficial con la CURP, sino un papel simple con la clave que, posteriormente, sería requerida para incluirla en otros trámites como el RFC y la cédula profesional. Aunque su objetivo era simplificar trámites, la clave única nunca se convirtió en identificación oficial ni se expidió una credencial única con la clave, que sirviera para todas las dependencias.

Larga historia

La intención de realizar un registro e identificación de todos los habitantes del país es un tema viejo que sigue sin poder modernizarse. La información de cada ciudadano ha estado en manos de la Secretaría de Gobernación desde 1936, cuando se creó la Dirección General de Población, que se convertiría, en 1980, en el Registro Nacional de Población e Identificación Personal, dependiente de la Segob. Empero, la creación de ninguna de estas oficinas y registros ha dado como resultado la expedición de una identificación oficial con fotografía que contenga todos los datos de su propietario.

La credencial para votar ha sido considerada como identificación oficial desde 1990, cuando el IFE obtuvo su autonomía y generó una credibilidad absoluta en la ciudadanía; quien reconoció a partir de entonces a la credencial de elector como instrumento universal de identificación. Sin embargo, el artículo octavo transitorio del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE), estableció que esta medida sería temporal y que para el año 2000 debería existir un nuevo instrumento de identificación oficial, deslindado ya de la credencial de elector; a fin de que ésta última se utilizase exclusivamente en los procesos electorales.

"Durante el primer semestre de 1997, la Secretaría de Gobernación publicará el acuerdo mediante el cual dará a conocer el programa para el establecimiento del Registro Nacional de Ciudadanos y la expedición de la correspondiente cédula de identidad ciudadana, con vistas a su utilización en el proceso electoral federal del año 2000, realizándose en su oportunidad las modificaciones legales necesarias para regularizar las adecuaciones pertinentes al actual Registro Federal de Electores", dicta el artículo.

Esto significa que la credencial de elector es hoy una identificación reconocida en todo el país pero, técnicamente, ya no es oficial, al haber expirado esta facultad hace casi 6 años; lo que muestra la necesidad de un nuevo documento de identificación oficial, expedido, esta vez, por quienes cuentan con el registro de cada ciudadano mexicano y no sólo de los votantes: el INEGI o el RENAPO.

"Usos y costumbres"

El promotor de la credencial inteligente, el senador Alfredo Reyes, asegura que el freno a este proyecto ha sido la discordancia entre partidos al interior de la comisión de origen pero, sobre todo, la lenta (y en algunos casos) nula respuesta que obtuvo de las secretarías que resultarían involucradas en este proyecto: Secretarías de Hacienda y Crédito Público y de Gobernación, Registro Nacional de Población, Instituto Federal Electoral e Instituto Mexicano del Seguro Social.

El panista, quien presentó la iniciativa en la tribuna de la Cámara Alta el 28 de abril de 2005, asegura que las partes involucradas han mostrado cierto recelo ante la posibilidad de que toda la información ciudadana sea manejada nuevamente por Gobernación, pero más allá de eso, se rehusan a cancelar todas las credenciales existentes para crear una nueva.

En el caso del Instituto Federal Electoral, su director jurídico, Fernando Agiss, envió una carta al senador el 30 de agosto de 2005 en la que argumenta que, pese a no encontrar impedimentos jurídico- legales para llevar a cabo la iniciativa, antes debe revisarse si el IFE estaría listo para emitir nuevas credenciales antes del 2 de julio; así como verificar "qué tantas medidas de seguridad contendría el documento en el que se expida el Número Único de Identidad, a fin de que se evite la falsificación del mismo o posibles errores que tengan que ser corregidos".

Así, el jurídico del IFE no negaba ni aprobaba este proyecto, por lo que el legislador habló directamente con los consejeros Virgilio Andrade y Rodrigo Morales, quienes le señalaron que no era un buen momento para una reforma de este tipo, por la cercanía con el proceso electoral y basaron su negativa en los "usos y costumbres" de la población, es decir, que históricamente quien ha tenido la autoridad y credibilidad para emitir esa credencial ha sido el IFE, al contar con la confianza ciudadana de que no se hará mal uso de ese documento.

"Lo que pido es que pasemos de los 'usos y costumbres', como dijo el IFE, al fiel cumplimiento de la ley. Hoy ni la segob ni el IFE la están cumpliendo, porque el COFIPE dice que quien emitirá la credencial de identidad será el estado, no el IFE. El vehículo oficial trató de ser el CURP, pero quedó muy chiquito, debemos pasar de un número a una cédula de identificación oficial", precisó el senador.

Entrevistado en torno a este tema, el consejero Virgilio Andrade rechazó haber argumentado los "usos y costumbres de la población" y precisó que la negativa para este proyecto se basa, exclusivamente, en la imposibilidad de expedir nuevas credenciales de elector en plena campaña. "No es el momento adecuado (...) es un tema que requiere de una gran reflexión y de revisar si hay un marco constitucional adecuado. La intención puede ser adecuada pero el tiempo no", puntualizó el consejero electoral.

Indiferencia

Para que el proyecto pudiera, al menos, discutirse en el pleno de Xicoténcatl, requería el visto bueno de las dependencias involucradas, específicamente la firma del subsecretario de Población, Migración y Asuntos Religiosos, Lauro López, quien hasta el momento no dió al senador una respuesta definitiva, lo que provocó que ya no fuera posible presentarla, al menos, en este sexenio.

"Carlos Anaya (director del RENAPO) me dio la bien y luego el subsecretario (López) me dio el avión, porque me dijo que si a todo, que nadamás le diera tiempo para que CONAPO y luego Migración aceptaran, que por él no había problema. Dijo que tenía que consultarlo con Dionisio (subsecretario de Enlace Legislativo), yo traté de juntar todas las partes pero Dionisio canceló el día que teníamos reunión con el IFE", relató el legislador.

Otra de las instancias que rechazaron este proyecto fue la Secretaría de Hacienda, misma que tendría que reorganizar los recursos que se asignan, a cada secretaría, para la emisión de credenciales. Según el senador Reyes, para Hacienda resulta "inadmisible" este proyecto, aun cuando el Servicio de Administración Tributaria de dicha secretaría cuenta ya con su propia tarjeta digitalizada, conocida como "tributaria".

Como parte de los cabildeos que realizó el legislador, se consultó a diversas empresas especializadas en fabricación de credenciales, para estimar cuánto costaría la credencial al gobierno federal, resultando en un promedio de 6 dólares por cada plástico; mismo que contendría la fotografía y huella digital del propietario, así como un chip con todos los números de identidad que hasta el momento hubiese tenido el ciudadano: RFC, IMSS ó ISSSTE, Registro Civil, CURP, etc.

"Porque no pensar en una credencial inteligente que sirviera, además de para pagar impuestos, para inscribir a ese individuo al Seguro Social, al programa Oportunidades? Además, con un banco de datos se evitan los fraudes en la aplicación de los programas, porque hay muchas personas que se inscriben a varios programas al mismo tiempo, o mienten en sus declaraciones para ser acreedores a un apoyo".

Así, el proyecto de simplificar la tramitología que los ciudadanos deben realizar a través de una credencial digital universal, que les permitiera incluso recibir dinero del extranjero sin pagar altas comisiones bancarias, se fue con la 59 Legislatura y con el sexenio. A pesar de ser un proyecto que puede llevar a cabo el INEGI, un órgano descentralizado que trabaja independientemente del gobierno en turno, no fue posible presentarla a tiempo para que, de aprobarse, se realizaran las reformas pertinentes y entrara en vigor después del 3 de julio. Su única posibilidad es que, al iniciar la LX Legislatura, los recién electos diputados la descongelen y repitan todo el proceso de cabildeo ante el nuevo gobierno federal.
(No publicado, entregado a El Universal el 4 de mayo de 2006)

1 de diciembre


Finalmente sucedió. Después de alrededor de 15 meses de desgaste, el pobre, miserable pueblo de México vio hoy, por fin, el final de un tortuoso proceso electoral; durante el cual se perdió mucho y no se ganó absolutamente nada. Solo ganaron, evidentemente, aquellos empresarios cuyos negocios están relacionados con el desarrollo y logística de las elecciones: los medios de comunicación -en primer lugar-, los fabricantes de boletas y material electorales, el sector turístico (que recibió a los candidatos, sus equipos y la prensa durante seis meses) y por supuesto, quienes cobrarán durante seis años, el apoyo que ofrecieron al candidato de Acción Nacional, hoy presidente de México, Felipe de Jesús Calderón Hinojosa.

Increíble que un personaje de tan poco nivel, de nulo carácter, que jamás trascendió ni destacó demasiado en ninguno de sus cargos, hoy sea el primer mandatario; pues a pesar de haber sido siempre una figura notoria y siempre presente dentro de la política nacional, jamás mostró el temple, la personalidad ni el nivel para ser un presidente y, mucho menos, para conquistar legítimamente el voto de una mayor parte de la población. Verdaderamente increíble que después de escándalos como el de Banobras, su cuestionado papel como secretario de Energía y, sobre todo, después de ventilado el asunto de Hildebrando, el "cuñado incómodo" y su inexplicable posesión del padrón electoral, Calderón haya logrado obtener tanto apoyo de una población de por sí decepcionada de la actuación del PAN en el máximo poder del país.

Porque aun con la sospechosa aparición del padrón electoral en la página de Hildebrando, aun con las largas -muy largas- horas que tardó el IFE en contabilizar el último uno por ciento de los votos, aun con la confesa intervención del todavía presidente Fox en el proceso electoral y la admitida intervención del sector empresarial, y aun con el evidente e innnegable apoyo que siempre tuvo su principal contendiente, Andrés Manuel López Obrador, éste perdió contra Calderón por menos de un punto porcentual. aun Con el evidente fraude encima, fueron la soberbia de AMLO y la pésima estrategia de todo el clan perredista, los verdaderos culpables de su derrota.

México no logró sumarse a la ola izquierdista que arrasa hoy con los gobiernos de Hispanoamérica. La excesiva confianza que el candidato de la "izquierda" depositó en sus prácticamente ganados votos, dejó el camino libre a la derecha para el efectivamente existente complot, para el fraude; pero también para la develación del verdadero rostro de quienes se asumen como revolucionarios, liberales, defensores del "bien de todos".

Otros seis años de PAN. Otros seis años de empresarios inexpertos al mando del país. Otro sexenio de privilegios a un sector de la población y migajas electoreras al resto; de una completa indiferencia e ignorancia de la inseguridad que se come todos los días a este país; de soberbia, de arrogancia, de farsas inútiles. Sólo que ahora sin máscara: este panista no se disfraza de campesino, de sensible, de genuino, simpático ni populista; este panista no llega con promesas imposibles ni metas inalcanzables, no. Este panista llega con la nulidad y el cinismo de quien obtuvo la presidencia, pero no la ganó; de quien tiene de su lado todas las herramientas (poder, dinero, ejército, legisladores, iglesia y hasta algunos medios), con el descaro de quien no tiene que ofrecer nada pues ya lo tiene todo y, por el contrario, amenaza con aplastar a quien ose quitárselo - basta ver la designación del secretario de Gobernación-.

Pobre país. ¿Será cierto que tiene el gobierno que se merece? Cuando durante 2 años se les fueron cayendo, una a una, las máscaras a los políticos de todos los partidos, sin excepción, y hasta a funcionarios sin partido, como los del Instituto Federal Electoral; mientras todos gastaban el dinero que todos estamos obligados a pagar en giras, spots, salarios de gente inútil, movimientos "revolucionarios" estériles y absurdos que, al final, no dejaron absolutamente nada. Al final de todo este circo, los mexicanos se quedaron sin todo ese dinero y sin el cambio que buscaban. Mientras ganadores y perdedores hoy terminan su guerra y seguramente empiezan otra, los mexicanos siguen soportando abusos laborales por no perder su empleo, realizando labores fuera de su profesión y hasta infringiendo la ley por la falta de trabajo, brincando bardas y cruzando ríos, cerrando negocios por la voraz competencia de los grandes capitales o por la violencia del narco y los grupos de choque. Todos siguen trabajando, buscando un trabajo o abusando los otros impunemente. Por mas que políticos de todos los partidos se hayan envuelto en la bandera nacional para justificar sus acciones en un sentido u otro, al final, México siguió siendo el mismo. Y no ganó nada.

jueves, noviembre 23, 2006

Ni voto ni me callo





En plena campaña electoral y en medio de un bombardeo de mensajes que invitan a votar, los abstencionistas por convicción permanecen estoicos: no han votado nunca ni piensan hacerlo el próximo 2 de julio, manifestando así su rechazo a todos los candidatos, mientras el IFE no tiene más herramientas que la promoción del voto.

Claudia Altamirano

Desde que cumplió su mayoría de edad, hace 20 años, Joel ha votado una sola vez. Motivado por la curiosidad, acudió con su madre a emitir el que sería su primer y único voto, pues tras esa fecha decidió no volver a votar por nadie, desanimado por el fraude electoral y las inconsistencias de la política nacional. Su rechazo es tal, que no está registrado siquiera en el padrón electoral del IFE, pues considera que nadie puede obligarlo a pertenecer a una lista de electores bajo el pretexto de una identificación oficial.

"Una sola vez voté y creo que era para presidente municipal, cuando aun no existía el IFE. No volví a hacerlo porque no creo en la política mexicana ni en sus políticos. Creo que la falta de cultura del voto no viene de una falta de educación, sino de una ausencia de gobierno real", argumenta.

Incluso, este microempresario de 38 años asegura que si alguna ley lo obligara a votar, tacharía toda la boleta para anular su voto, pues definitivamente no cree en la política. Asimismo, afirma que, si pudiera, convencería a todos sus compatriotas de no votar, a fin de manifestar una insatisfacción general con éste sistema político. "Si hubiera alguien que me convenciera, sí votaría, porque sí creo en el voto, pero bajo este esquema, el voto da lo mismo, porque es la mayoría de una parte muy pequeña de votantes".

Como Joel, en México hay cada vez más ciudadanos que renuncian a su derecho al voto ante la falta de opciones y la decepción que les han causado los partidos y los procesos electorales. Sólo en la última elección federal para renovar el Congreso, en 2003, el 59 por ciento de la población no acudió a las urnas y solamente en 6 estados el número de votantes rebasó el 50 por ciento del padrón, de acuerdo con un estudio del Instituto Federal Electoral.


Y la cifra de votantes parece ir en descenso: el estudio del IFE indica que la elección presidencial de 1994 registró el nivel de abstención más bajo de los últimos 20 años, con un 24 por ciento; seguida de la histórica elección del año 2000, cuando ésta cifra ascendió a 36 por ciento. En cuanto a la elección de legisladores, en 1991 el 34 por ciento de los electores se abstuvieron; para 1997 la cifra creció hasta 42 por ciento y repuntó en 2003, llegando hasta el 59 por ciento.



Y es que las personas confían cada vez menos en los partidos y sus candidatos, "Los políticos cambian de un partido a otro con mucha facilidad (...) no existe esa plataforma de partido, solo intereses. A las personas que no votamos nos dicen que para exigir tenemos que votar, pero ¿Si yo no me identifico con ningún candidato? Además los políticos en este país no cumplen con lo que prometen en las campañas", lamenta Joel.

Hombres, los más excépticos

Resulta paradójico que un país que exige democracia, no quiera participar en ella. Este fenómeno tiene varias lecturas, pero la más directa sería que el abstencionismo es la manifestación de una ciudadanía desinteresada, desgastada por la insatisfacción de sus necesidades, señala la consejera electoral del IFE, Teresa González.

Para la funcionaria, la democracia tiene que ver con la calidad de vida de cada habitante del país y el ejercicio de gobierno; donde hay altos índices de desigualdad y amplios sectores de la población que quedan excluidos de los bienes básicos, se trata de un gobierno que no responde a las necesidades sociales, que influyen directamente en la participación ciudadana. "Son ciudadanos insatisfechos con la democracia en términos de lo que ha aportado y de los resultados que da en su vida inmediata, cotidiana".

Contrario a lo que pudiera esperarse de una población que no ejerce su derecho al voto, entre los "abstencionistas" destaca una mayoría de hombres, de entre 20 y 30 años, que viven en zonas urbanas. Los estados donde históricamente se ha registrado un mayor índice de abstencionismo son Guerrero y Coahuila, siendo alcanzados en la última elección federal de 2003 por Baja California, que apenas rebasó el 30 por ciento de participación.

Ante este panorama, el IFE realiza campañas de invitación al voto a través de spots y de programas de educación cívica, impartidos a los funcionarios de casilla en el momento de su capacitación y al gran público en escuelas, centros patronales, empresas y organismos civiles. El objetivo: recuperar la participación ciudadana en la vida pública, no sólo en las elecciones sino en la toma de decisiones públicas, más allá de los procesos electorales.

Pero no sólo los partidos políticos son objeto de desconfianza para los ciudadanos. La posibilidad de contar con dos o más credenciales de elector con domicilios distintos, despierta la suspicacia de muchos votantes, quienes ponen en tela de juicio la fiabilidad de un padrón que no controla la duplicidad de credenciales.

Y es que, aun cuando una persona no puede votar dos veces con la misma credencial o con otra, pues en la lista nominal se tiene un solo registro y se emite una sola boleta por persona, lo cierto es que tener dos credenciales de elector sirve para identificarse con un domicilio distinto al real, al realizar trámites o pagos.

"El registro no es confiable, pues hay muchas personas que tienen dos credenciales con el mismo nombre pero diferentes direcciones, yo conozco dos casos, por lo menos. Entonces, ¿que tan fiel es ese padrón? Por eso ni siquiera estoy registrado, y para identificarme puedo usar mi pasaporte o licencia de conducir", señala Joel, a lo que la consejera González simplemente responde "Pues si, estos usos irregulares de la credencial de elector, desde luego que pueden afectar el sentido, el propósito de este documento y genera confusión".

Ganadores de minorías

La legislación mexicana no contempla la posibilidad de un segunda vuelta en sus comicios. Un candidato resulta ganador en los comicios siempre que tenga un mayor número de votos por sobre sus adversarios, aun cuando el porcentaje de población votante haya sido muy bajo. Bajo este esquema, un solo voto podría hacer la diferencia y otorgaría el triunfo a un candidato que no fue electo por la mayoría de la población.

En países como Chile y Perú, un candidato no resulta ganador hasta que obtiene una mayoría absoluta, aun cuando haya tenido más votos que los demás. Ello asegura que el ganador será un funcionario electo por una gran parte de la población, y no sólo una minoría. Hasta ahora el congreso mexicano, de mayoría priísta, no ha intentado acceder a este esquema.

"Es un tema muy complejo", apunta la consejera, presidenta de la comisión de cultura cívica del IFE. "Es meternos en los sistemas electorales y a revisar los regímenes parlamentarios donde se contempla esto; hoy por hoy, este es nuestro sistema electoral, que tiene sus ventajas y desventajas, pero esto tiene que ver con las historias nacionales en términos de las normas y leyes, con nuestras características específicas tenemos esto, pero creo que es tan válido el uno como el otro".

Precisamente por ello, destacó la consejera, es importante que todos vayan a votar, pues cualquier porcentaje de votos, sea menor o mayor, decidirá quien gobierna el país los próximos seis años.

Si no votas, ¿cállate?

Octavio se decepcionó de la política mexicana desde que, en su adolescencia, comenzó a enterarse -a través de los medios- de lo que sucede al interior de los partidos y los gobiernos. Como Joel, no se inclina por ningún partido y cree que ninguna figura extraida de ellos sabrá gobernar este país. A sus 31 años, no ha votado ni una sola vez, y su credencial de elector se usa sólo como identificación. La parte trasera de su credencial, donde se perfora en cada elección, está intacta.

"Nunca he votado porque no creo en un sistema gubernamental como tal. Ningún candidato me ha convencido para que logre alguna especie de cambio social en el país. Nuestros padres han votado, nuestros abuelos, y si les preguntamos, siempre nos dicen que nunca han visto cambio alguno en el país con los diversos representantes del pueblo. La politica es solo una total sed de poder para lograr sus objetivos personales", argumenta.

Y las campañas de promoción del voto no surten efecto en estos abstencionistas por convicción. Para Joel, la campaña "Tu rock es votar", que invita a los jóvenes a votar bajo el lema "Si no votas, cállate", es errónea, incongruente y excluyente. Considera que cualquier ciudadano que pague impuestos y cumpla con sus obligaciones civiles tiene derecho a quejarse de un mal gobierno, aun cuando no haya votado por él.

"Entonces, a los que no votaron, ¿les cobran menos impuestos? No. ¿Podemos desobedecer y estar fuera de la ley? No. De cualquier modo eres ciudadano, eres contribuyente y pagas impuestos aunque no estes dado de alta en el SAT, por lo tanto, tienes derecho a exigir y quejarte", sentencia.

Asimismo, Joel considera que ni los músicos ni ese mensaje son el modo más adecuado para invitar al voto, pues, señala, en lugar de decir "cállate", deberían explicar la importancia del voto y la consecuencia de su omisión.

"Si en una elección votó el 34 por ciento de la población, ¿los electos van a gobernar sólo para ese porcentaje? ¿Los demas no existen? Nos vamos del país los que no votamos? Nos borran de todo registro? Si no puedo exigir por no haber votado, entonces que no me cobrren impuestos ni me pongan obligaciones civiles. Esa campaña es una incongruencia y es excluyente", puntualizó.

Por su parte, Octavio afirma que se trata de una simple estrategia publicitaria que no surtirá efecto, cuyo mensaje representa un acto de intolerancia; "¿Por qué nos habríamos de callar? Nadie tiene el derecho de hacerte callar por no hacer algo que no quieres", reclama.

Para la elección del próximo 2 de julio, Joel y Octavio harán lo mismo que en años anteriores y que seguirán haciendo mientras no haya un candidato que los convenza: dejar su boleta electoral intacta. "Ni voto ni me callo", responde Octavio.

lunes, noviembre 20, 2006

El machismo disimulado


En el Día Internacional de la Mujer, las únicas 4 mujeres que han sido candidatas a la Presidencia de México reflexionan sobre la participación de la mujer en la política y la sociedad y coinciden en un señalamiento: el machismo de hombres y mujeres sigue ahí, pero ahora se esconde en el clóset.

Claudia Altamirano

México cuenta en su historia democrática sólo 3 mujeres entre sus aspirantes a la presidencia: Rosario Ibarra, Marcela Lombardo y Cecilia Soto, a quienes hoy se suma Patricia Mercado. A propósito del Día Internacional de la Mujer, las ex candidatas y la actual, rechazan que la misoginia haya puesto obstáculos en su carrera política, pero afirman que el todavía latente machismo se deja entrever en la violencia, la minimización del trabajo de la mujer y una disimulada actitud de rechazo a sus propuestas. Los hombres, dicen, ya nos reconocen pero aun nos limitan.

México tardó 65 años en registrar una candidatura femenina, hasta 1982, cuando el Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) presentó a Rosario Ibarra como la primera candidata a la presidencia. Prestigiada luchadora social, fundadora del comité Eureka en pro de los desaparecidos, exiliados y presos políticos, doña Rosario no enfrentó ninguna limitante a su candidatura por el hecho de ser mujer: con el estandarte siempre presente de su hijo Jesús Piedra, desaparecido en 1975, se vió apoyada desde el primer momento por numerosos grupos de izquierda y un amplio sector de la sociedad que exigía justicia, impactado aun por las atrocidades de la guerra sucia.

Pero la candidatura de Ibarra rompió más de un mito: además de ser mujer, no contaba con la preparación académica y la experiencia política que ostentaban siempre los candidatos; ella era solamente "la madre de un desaparecido", lo cual daba fuerza y sustento a su petición de justicia. "Muchos me decían 'señorita licenciada' y yo les contestaba 'ni señorita ni licenciada'. Ese fue el precedente que establecimos, que cualquiera, hombre o mujer, de cualquier nivel, puede aspirar a ser presidente", señala con orgullo la activista, que recién cumplió 79 años, el 24 de febrero pasado.

Además, su candidatura hacía pedazos la muy admirada pero falsa política exterior del gobierno mexicano, que rompía relaciones con los dictadores y asilaba a sus víctimas, pero cometía las mismas violaciones contra sus propios gobernados. "Con mi candidatura logramos dar a conocer esto en el ámbito internacional y abrimos espacios en la ONU y otros organismos; ese fue uno de los beneficios de que yo tuviera esa candidatura".

Sin embargo, no todos parecían apreciar este avance de la participación femenina en la política, como lo demostraba un periódico -"de esos libelos que no valen la pena" como la misma Rosario lo llama-, que publicaba en su primera plana: "Salida del metate quiere ser presidenta". Además de cuestionar su capacidad para ocupar un cargo público, resultaba discriminatorio. "No es ninguna vergüenza saber manejar un metate, no hay ninguna deshonra en que una mujer trabaje en su hogar para el bienestar de su familia. Y aun cuando yo hubiese sido una mujer campesina que manejase el metate, tendría todo el derecho de cualquier ciudadano de participar en algo que nos concierne a todos", exclama.

El peso del aparato político priísta cayó sobre su candidatura, por lo que doña Rosario no deseaba contender nuevamente en 1988; empero, un muchacho que formaba parte de los grupos de izquierda a los que ella apoyaba, le pidió que no abandonara la lucha y volviera a ser candidata. Así, Rosario Ibarra se lanzó nuevamente a la grande, con el mismo resultado.

Tras haber establecido el antecedente de ser la primera mujer candidata a la presidencia en México, y haber dado espacio y voz al Comité Eureka en el Congreso -siendo diputada federal-, Rosario Ibarra descarta por completo la posibilidad de contender nuevamente por un cargo público. "No, yo ya no estoy para eso, se necesita mucha fuerza", dice mientras ríe, cual si para seguir buscando a su hijo a más de 30 años de su desaparición, y seguir luchando al lado de las familias de más de 250 desaparecidos, no se requiriera de una extraordinaria fuerza.

Cambiar la mentalidad

Tras el evidente triunfo en 1988 del Frente Democrático Nacional en las urnas, la izquierda intentó revivirlo seis años después, sin éxito. Ello obligó al Partido Popular Socialista (PPS) a lanzar un candidato propio: Marcela Lombardo.

Era la tercera vez que aparecía el nombre de una mujer en las boletas electorales, lo que generaba un buen ánimo entre la población femenina, que asistía en mayor medida a los mitines para apoyar a la candidata y pedirle su apoyo: "Yo sostengo a mis hijos", "Yo no tengo esposo", "Se fue a Estados Unidos, ayúdeme porfavor", eran las demandas de madres solteras, esposas de migrantes o mujeres, simplemente, abandonadas.

Pero no todos apoyaron a Marcela. Su condición de mujer y su parentesco con el fundador del partido, Vicente Lombardo Toledano, generaron inconformidades –discretas pero perceptibles- al interior del partido e, incluso, el rechazo se manifestaba en algunos de los hombres que asistían a sus eventos públicos: permanecían ahí, pero se mantenían apartados para no ser vistos apoyando a una mujer.

Luego de que el PPS perdiera su registro, Lombardo decidió ocuparse de lleno en la difusión del pensamiento lombardista a través del Centro de Estudios Filosóficos y Políticos Vicente Lombardo. Ahí, en su despacho, Marcela señala que la lucha más importante en materia de equidad de género radica en cambiar la mentalidad tanto de hombres como de mujeres, pues "también hay mujeres que no les importa la vida política, que no quieren participar, o que esperan a ver qué dice el marido o el sacerdote, eso aun no se acaba de cambiar", lamenta la maestra.

Lombardo señala la independencia como parte medular de la igualdad, por lo que recomienda a todas las mujeres "ser suficientes a sí mismas y a su familia, que no dependan de nadie, eso va formando otra mentalidad".

Independencia, primero en la cartera

Marcela Lombardo no sólo contendió en 1994 con hombres por la presidencia de la República; desde el Partido del Trabajo, otra mujer competía con ella en la carrera presidencial: Cecilia Soto, quien coincide con Lombardo en ese punto: "la independencia de una mujer empieza en su cartera".

Para ser autónoma, una mujer precisa experimentar lo que es ganar su propio salario y decidir sobre él, a decir de Soto, quien actualmente se desempeña como embajadora de México en Brasil, país en el que, asegura, la participación económica de las mujeres rebasa ya el 42 por ciento.

La educación como herramienta para combatir la desigualdad de género encuentra un obstáculo en lo que la Cecilia llama "educación sentimental", refiriéndose a ciertas ideas y valores perpetuados generación tras generación, que inducen una dependencia moral y emocional hacia los hombres. "Es un trabajo generacional, tomará tiempo romper el techo de cristal, es una cultura que se va ganando generacionalmente", puntualiza la embajadora.

En su campaña de 1994, Soto encontró una actitud positiva pero sobre todo de curiosidad, "les parecía extraño una mujer que hablaba sujeto, verbo y complemento sin equivocarse", recuerda. Las candidaturas femeninas, afirma, son consideradas como un ejercicio democrático, pero no son tomadas en serio; pues no hay suficiente confianza en que una mujer pueda ganar, estando arraigada aun en el inconsciente colectivo la idea de que lo natural es que las responsabilidades de gran riesgo las ejerza el hombre.

Lo anterior denota la persistencia de un "pragmatismo machista" , que aplaude a la mujer que lucha, pero no le permite llegar hasta el final de su objetivo, basándose en la desconfianza hacia su capacidad. "En la medida en que más mujeres ejerzan el poder se va quitando esa percepción y se sustituye por la idea de que las mujeres tienen la misma capacidad. Es importante que las mujeres vean a más mujeres", señala Soto.

Techos de cristal

Con este fin, la que fuera presidenta del extinto partido México Posible y hoy abanderada del Partido Alternativa Social Demócrata y Campesina (PASC), Patricia Mercado, ofrece a las mujeres, de llegar a Los Pinos, desarrollar políticas para romper las "paredes de cristal en que aun están encerradas las mujeres pero que nadie ve", en referencia a las limitaciones laborales y sociales que aun enfrentan las mujeres, en un entorno de supuesta igualdad. "Las mujeres ya están en todos lados pero están en nichos, no pueden entrar en todas las actividades productivas, hay techos invisibles, pues su ascenso dentro del trabajo tiene un tope, aunque parezca que se les da oportunidades, son limitadas", asegura.

En este contexto, Mercado subraya la necesidad de aplicar la recomendación de la Organización Internacional del Trabajo sobre los ejercicios de valoración comparable en las empresas, dado que, cuando una mujer accede a una profesión, ésta se desvaloriza en términos salariales; "como en los telares, donde hasta que se volvieron electrónicas las máquinas y no requerían una fuerza enorme para ser operadas, fueron ocupadas por mujeres, pero les siguieron pagando como costureras, mientras que el hombre ascendió a ingeniero textil".

Su plataforma política incluye, en materia de género: la promoción de la píldora del día siguiente, la despenalización del aborto, regularizar la capacidad de las mujeres para ser dueñas de tierras en el campo; flexibilizar los requisitos para otorgarles financiamiento para proyectos productivos y hacer compatibles los horarios de escuela y trabajo, a fin de que las mujeres no deban tomar la disyuntiva entre familia y trabajo, "dejemos la carga arcaica de México de que las madres se encarguen de la vida familiar", apunta.

Pero el reto mayor, en opinión de la candidata del PASC, es resolver la ruptura que generó la liberación de las mujeres en una sociedad que aun no sabe cómo hacer este nuevo tránsito. Patricia afirma que la violencia contra las mujeres ha crecido porque no se aceptan sus nuevos roles, y pone como ejemplo los asesinatos en Ciudad Juárez, reflejo del rechazo al trabajo femenino y su autosuficiencia. "Todos añoran el viejo tiempo en que las mujeres estaban en la casa. Hay una ruptura muy fuerte, hay muchos hombres viviendo solos y esto a veces genera rencores hacia las mujeres".

Pese a ello, Patricia Mercado está segura de sus posibilidades de ganar la elección, confiando, precisamente y sobre todo, en la participación de las mujeres, que la lleven a ser la primera presidenta de México y la quinta de Hispanoamérica por elección popular.

Desafían al SIDA


Un creciente número de hombres en Estados Unidos y México ha convertido el sexo sin protección en una ideología, argumentando que el SIDA no se transmite por vía sexual, o buscando el contagio como un modo de “liberación”.

Claudia Altamirano

Tras analizar los patrones de su vida sexual, Alfredo comprendió que, si después de su primera vez, no ha vuelto a usar preservativos, encajaba en la categoría de “pasivo bareback”, de manera que decidió anunciarse así en un sitio web de encuentro gay. El resultado: más posibilidades de encuentros. El riesgo: contraer el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). Su postura: no teme el contagio porque el SIDA, asegura, no es una enfermedad de transmisión sexual.

Alfredo forma parte de un creciente número de hombres que, en Estados Unidos y México, han renunciado al preservativo como una forma de desafiar al SIDA, ya sea porque buscan adquirir el VIH o porque creen que no es sexualmente transmitible, sino que se desarrolla dentro del cuerpo como consecuencia de un debilitamiento del sistema inmunológico; lo que significa, de acuerdo con ésta hipótesis, que no es una enfermedad mortal y que el sexo desprotegido no implica ningún riesgo.

Esta práctica es conocida como bareback, cuya traducción es “montar a pelo”, aunque su interpretación práctica es el sexo anal sin protección. Aunque el sexo desprotegido entre hombres ha sido siempre una práctica común, ésta nueva tendencia de rechazo al condón tiene diversas motivaciones: obtener mayor placer, desafiar el peligro como en un deporte extremo, jugar con el VIH a una suerte de ruleta rusa, en una orgía donde participan seropositivos y negativos; o quienes están convencidos de que el riesgo en esa práctica, simplemente, no existe.

“No existen evidencias clínicas de la infección como tal, el virus no es una enfermedad adquirida, es un debilitamiento del sistema inmune por estrés, exceso de medicamentos, automedicación, el exceso de conservadores en los alimentos enlatados. Por lo tanto, no hay riesgo de contagio en el sexo sin condón”, asegura Alfredo, mientras sostiene en sus manos un libro de Christine Maggiore titulado “¿Qué tal si todo lo que sabes sobre SIDA fuera mentira?”, que contiene testimonios de personas alrededor del mundo que presuntamente se “recuperaron” del SIDA con un tratamiento de refuerzo del sistema inmune.

Revalorar el SIDA
Como Alfredo y la autora del libro, hay cientos de personas convencidas de que toda la información conocida sobre el SIDA es parte de una complicidad entre gobiernos, medios informativos y empresas farmacéuticas para controlar a la población, imponer el uso del condón y obtener beneficios del VIH. Incluso, un organismo llamado Organización Internacional para el Replanteamiento Científico del SIDA, promueve entre la población la firma de un documento que exige a los editores de la revista Nature realizar una encuesta entre sus lectores sobre un posible debate sobre el tema entre los virólogos David Baltimore y Peter Duesberg, éste último defensor de la hipótesis de que el SIDA no es causado por el VIH. Hasta el momento, ha reunido 174 firmas.

Como una forma de resistencia, quienes apoyan esta idea del sexo “natural” lo plantean como “un movimiento de revaloración del SIDA”, que rechaza toda la información ofrecida durante los últimos 25 años por la comunidad médica internacional, organizaciones civiles y medios informativos. La que fuera denominada como la pandemia del siglo veinte hace apenas un par de décadas, hoy ha sido reducida por éstas personas a un mal crónico controlable, comparándolo con el cáncer y la diabetes.

Riesgos múltiples

Esta idea “relajada” del SIDA podría haberse alentado por el avance científico en la materia, que ofrece más y mejores medicamentos a los seropositivos, quienes ya no se enfrentan a una muerte rápida y desgastante como antaño, afirma Jorge Saavedra, director del Centro Nacional para la prevención del SIDA (CENSIDA), quien advierte, por otro lado, que éstos fármacos no son una solución mágica, “además de su alto costo, con el tiempo desarrollan resistencias y es necesario cambiar constantemente el tratamiento”, apunta el galeno.

Sobre los llamados bug chasers, que ven el contagio como una “bendición” o como “el momento más excitante de su vida”, confiando en que los antiretrovirales los mantendrán vivos, Saavedra explica que el estar infectado “no es el final de la historia”, pues las cepas del virus mutan al pasar de una persona a otra y se van volviendo resistentes a los fármacos, corriendo el riesgo de desarrollar una cepa multiresistente que inutilice a casi todos los fármacos existentes; amén de lo que le cuesta al estado otorgar nuevos tratamientos a quienes no pueden pagarlos.

Por si fuera poco, agrega el médico, los homosexuales tienen mayor riesgo de adquirir el VIH, pues el ano tiene 10 veces más probabilidades de infección que la vagina, pues ésta tiene recubrimientos y fluidos que la hacen más resistente, siendo menos susceptible que la vía anal.

Pero esto no exime a las mujeres de ser contagiadas al estar excluidas de la práctica del bareback. “Me he topado con muchos hombres casados, obviamente bisexuales o gays de clóset, que tienen relaciones con hombres sin protección; me he encontrado vecinos en el vapor que son casados”, relata Alfredo.

Sin barreras
“El bareback se practica en todos lados –prosigue-, casi nadie usa condón. Pero en muy pocos lados se anuncia como tal, sólo en las orgías, para atraer más gente. En los cuartos oscuros de los bares gay casi nadie trae condón. Muchos al principio lo piden pero ya en el calor de la situación, la protección pasa a segundo término, y en esos sitios van pasando de uno a otro, en medio de un fuerte olor a semen, a sangre, orina, excremento y sudor concentrado”.

La red de Internet es una herramienta básica para el encuentro bareback, a través de chats, correos y sitios de información sobre esta práctica que la proponen como “sexo al natural”. Incluso, un sitio web de los Estados Unidos que funge como “directorio bareback”, incluye a un hotel en Acapulco que ofrece la posibilidad de un encuentro sexual en terrazas y jacuzzis al aire libre, ostentándose como “amistosos hacia los gays”.

En contraparte, el sitio web Anodis.com, que ofrece información sobre los homosexuales, sus derechos, noticias sobre los avances en la lucha por su reconocimiento legal y sitios de encuentro, advierte en numerosos artículos sobre los riesgos del bareback y promueve el sexo seguro.

En este contexto, el director de Censida rechaza que el bareback sea una forma de liberación contra una imposición social: “Esta interpretación la darán muchos como justificación, pero ¿cuál imposición? Si se siguen manteniendo 800 millones de relaciones sexuales desprotegidas al año en México”.

Precisó también que, de los 4500 nuevos casos de SIDA presentados en el último año, el 96 por ciento se dió a causa de relaciones sexuales desprotegidas, de las cuales, un 52 por ciento fueron entre hombres (gays y bisexuales); a pesar de toda la información y advertencias que hay a ese respecto.

“Pertenezco a la generación de hombres que nos enseñaron que el condón era parte misma del sexo; incluso hay quienes les causa excitación el ponerlo, pues te enseñan a disfrutar el sexo a través del condón, cosa de la que yo estoy totalmente en contra; creo que la naturaleza humana nunca se ha puesto barreras mecánicas entre dos personas. Es como comprarse una paleta y comersela con envoltura, que fea sabe”, argumenta Alfredo.

El diseñador textil arguye que los condones, “digan lo que digan”, son ásperos, además de que generan una disociación mental: “Lo tengo dentro o no?”. Y aunque muchos hombres heterosexuales aseguran que no hay diferencia en la sensación, Alfredo deduce que no han llegado hasta el límite de su sexualidad; “los gays sí somos muy dados a explotar al máximo de lo que nos toca gozar en la vida, nos damos ese permiso, esa libertad, ese cinismo de hacer lo que nos da nuestra regalada gana”.

Fredy ha tenido varios amigos que murieron de SIDA, pero afirma que ninguno tuvo la información que él tiene hoy, por lo que todos asumieron inmediatamente que iban a morir, sin imaginar que había otras opciones.

“Nunca nadie te dice que del SIDA te puedes recuperar, siempre te condenan a muerte y te matan desde ese momento (...) El tener sexo no tiene porque ser una sentencia de muerte. Yo llevo 15 años teniendo sexo así y estoy vivo. Me pongo condón o me muero, ¡que flojera! Si mi sexualidad va condicionada en esos parámetros, que panorama tan triste”.

Subestimar la vida
El doctor Saavedra clasifica el bareback en dos motivaciones básicas: la tendencia de los más jóvenes a correr riesgos y, en los adultos, la influencia de una baja autoestima; derivada, a su vez, de diversas razones, como estar ya infectado con el virus, o porque en esta sociedad no encuentran su rol como homosexuales, siendo algo socialmente aceptable en Hispanoamérica. “Quien es adulto y sabe del riesgo que corre de contraer una infección mortal, y aun asi lo asume, probablemente no estime tanto su vida”.

El galeno atribuye este problema de autoestima, en parte, a la sociedad; pues es dificil mantener una buena autoestima donde se sufre el rechazo de todos por una preferencia sexual; limitándolos a expresar su orientación sexual es en la intimidad del sexo o en el contacto por Internet. “Ser seropositivo o ser gay es suficiente razón para que algunas familias corran a sus hijos de la casa y esto desencadena otro problema: es mas inestable, tiene mas baja la autoestima, es mas difícil que sea constante en su tratamiento, todo a causa de una situación moralmente desgastante, como es vivir expulsado del seno familiar. En un ambiente homofóbico no se les puede pedir alta autoestima”, refirió.

Y lanzó una importante advertencia: la presencia de un médico colombiano –del que Censida aun no confirma la identidad- que imparte conferencias en México en las que afirma que el VIH no existe, sin tener ninguna base científica que sustente su hipótesis. Saavedra indicó que muchas personas podrían creerle, empero, afirmó que utilizar esta idea como argumento para no usar preservativo es una justificación de su baja autoestima, que los lleva a asumir este riesgo.

“Pero no se les puede culpar, si se hablara de culpas, sería una culpa social, por tener estos niveles tan altos de homofobia que hace que personas con alto riesgo en el VIH no tengan una mayor autoestima y decidan tomar estos riesgos tan altos”, concluye el funcionario.

Por su parte, Alfredo dice no tener miedo de contraer el VIH, en cambio, teme que el cáncer que padeció su madre pueda ser hereditario. “Quiero tener la oportunidad de recuperarme si eso pasara, no morirme de SIDA, mantener bien mi sistema inmune y no morir en un hospital del sector salud”, comenta.

-¿Confías?

-Sí. Tengo fe.

http://www.eluniversal.com.mx/nacion/136512.html

jueves, septiembre 28, 2006

El último tren- escuela

Publicado en Milenio Semanal
Fotos: Octavio Hoyos

Las cuadrillas de trabajadores ambulatorios de la extinta Ferrocarriles Nacionales de México, dejaron, a su paso por la ruta ferroviaria, campamentos compuestos por familias enteras que viven en vagones de tren adaptados como casa habitación. Cada campamento contaba con una escuela instalada en otro vagón y reconocida por la Secretaría de Educación Pública, para garantizar la continuidad en los estudios de los hijos de los trabajadores. La última de esas escuelas, hoy, está a punto de desaparecer.

Una de las ùltimas cuadrillas de ferrocarrileros que permanecieron tras el cierre, en 1995, de Ferrocarriles Nacionales (FNM), se encuentra en el poblado de San Bartolo, en Naucalpan, Estado de México. Mientras estuvo en funcionamiento, la empresa ocupó algunos de sus vagones como viviendas ambulantes de los obreros que recorrían el país dando mantenimiento a las vías del tren, lo que les impedía asentarse a vivir en un lugar fijo.

Con el tiempo, las familias fueron creciendo y, ante la necesidad de darles educación a los niños de las cuadrillas, FNM solicitó a la SEP permisos y personal para instalar escuelas dentro de los vagones; sin embargo, los maestros fueron abandonando sus puestos en busca de mayor estabilidad y mejores salarios, lo que provocó que fueran desapareciendo las escuelas. De esta forma, la primaria "Adolfo López Mateos", con clave 15DPR3008L, quedó como la última escuela ambulante del país, de acuerdo con el testimonio del maestro titular, Jaime Contreras.
Este profesor, oriundo de Puebla, ha impartido clases bajo esta modalidad durante toda su vida laboral, cumpliendo el pròximo 16 de octubre 29 años de servicio. Faltando un año más para su jubilación, el profesor confía en que le sea otorgada con antelación, pues las autoridades no tienen ya ningún interés en mantener ese puesto de trabajo. Por ello, una vez concluido el presente ciclo escolar, solicitará su jubilación y pensión conforme a la ley. "Los años pesan y el cuerpo ya lo resiente. Este medio ya es un poco cansado y dar clases aquì es màs difìcil, en una escuela multigrado como èsta", argumenta el profesor.
Jaime se encarga de todo lo referente a la escuela: tiene 30 alumnos en 5 grupos de diferentes grados a su cargo, con horario de 8 a 13 horas y, además, realiza todos los trámites administrativos, lo cual acrecenta su de por sì pesada carga de trabajo. "Yo soy toda la escuela, porque yo hago la papelerìa, lo administrativo, a veces le hago de doctor, de prestamista, de aval, de consejero, hasta de intendencia cuando me toca. La gente me ha dado su confianza y yo tengo que retribuirla", comenta Jaime.

Antes de instalarse en Naucalpan, hace ya 12 años, el profesor y sus alumnos vivieron en Toluca, Mazatlán, Monterrey y otros estados donde los obreros daban servicio a las vías. A pesar de la baja remuneración por sus servicios, Jaime no desertó, pues estaba ya integrado a la comunidad y habituado a esa forma de vida. "Fui bien tratado por la gente de aquì, somos como una familia. El salario es muy bajo pero en otra escuela tambièn lo serà. Aquí nos hemos integrado muy bien, ademàs aquì hice toda mi vida laboral, ha habido buen entendimiento con la gente", expresa.
Alto nivel académico
El profesor Contreras se ostenta como un maestro "muy exigente". Gracias a ello, la escuela a su cargo tiene gran prestigio en la zona e, incluso, a nivel sectorial. Han ganado diversos reconocimientos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) , así como concursos de dibujo y ortografía a nivel regional. Jaime recuerda con especial cariño ese concurso: "Nadie creía que fuéramos a ganar. Nos invitaron sólo para participar, pero yo les inculqué a mis niños la idea de que no íbamos a participar, sino a ganar. Nos preparamos muy bien y, para admiración de todos, mis niños contestaron todo perfecto". Las madres de los niños, incluso, aseguran que éstos aprendieron a leer antes de entrar al nivel primaria.

Los alumnos cursan hasta quinto grado, pues los trámites para la certificación, al concluir el sexto grado, corren a cargo del profesor titular, quien simplemente no tiene el tiempo necesario para ello; por lo que los niños cursan el último grado en otras escuelas donde puedan recibir sus certificados. Éste es el primer año que van a tomar clases de computación, con un maestro especializado y equipos donados por asociaciones civiles y un partido político, "pero no le voy a decir cuál es", replica Jaime, aunque es de todos conocido que es el Partido de la Revolución Democrática (PRD) quien apoya a las comunidades de bajos recursos. Asimismo, se imparten clases de inglès, con maestras de escuelas particulares que se ofrecen como voluntarias.
La cuadrilla de San Bartolo es casi independiente, a pesar de estar reconocida por el municipio. Está domiciliada como Ferrocarril Acámbaro sin número, en San Bartolo. El nùmero de cada vagòn se ubica con los números de las casas que están a un lado de las vías. Tienen servicios de agua, algunos de drenaje, y la luz no está instalada formalmente, pues la Compañía de Luz y Fuerza (CFE) no ha atendido su solicitud de instalación. Cuando se inunda la zona por las lluvias, son los habitantes quienes tienen que retirar el agua y los desechos, ya que esperar a que les atienda el municipio implicaría vivir varios días en un foco de infección.

Todos los trabajadores de esa cuadrilla estàn activos porque fueron recontratados por Ferroviaria del Valle de México, pero ya no se desplazan a otros sitios, pues los trabajos de mantenimiento de vías ya sólo se realizan ahí.

"No nos vamos"

Sergio Miranda vive en el campamento de Tlatilco, conocido así por la cercanía con esa colonia, aunque el domicilio de la cuadrilla es Calzada de los Gallos # 190, Col. Plutarco Elías Calles. Lleva 25 años viviendo ahí, y 12 retirado de Ferrocarriles Nacionales. Esa cuadrilla está compuesta de 44 campamentos, habitados en un 90 por ciento por ferrocarrileros nactivos o retirados. En este caso, fue Terminal Ferroviaria de México la que recontrató a garroteros, fogoneros, maquinistas, guardacruceros y vigilantes, por tratarse de personal con amplia experiencia.

Hoy, Sergio trabaja en una oficina de ventas. Aunque ya no es ferrocarrilero, advierte que no dejará que nadie saque a su familia de esa casa, en caso de que las nuevas empresas ferrocarrileras quisieran recuperar esos terrenos. "No nos vamos a ir, no somos una ciudad perdida que invadió unos terrenos, esto nos lo dio Ferrocarriles", asegura. Ninguno de los habitantes posee títulos de propiedad, empero, cuentan con documentos que avalan la asignación por parte de FNM o, en otros casos, con papeles que avalan el arrendamiento de algunos terrenos. Asimismo, tienen el apoyo de su comité vecinal y, eventualmente, del PRD. "Nosotros sí nos iríamos siempre y cuando nos reubicaran en un buen sitio o al menos nos dieran una buena indemnización", señala.

Tren suburbano

Los trabajos para la reactivación de la ruta Buenavista- Cuautitlán Izcalli, que permitirán el paso del recién aprobado proyecto de tren suburbano, no afectarán a las cuadrillas de ésta vía, al tratarse de rutas distintas. Sin embargo, ya se contempla, en ambos campamentos, las medidas a tomar en caso de que fueran desalojados por éstas obras. En el caso de San Bartolo, el profesor Contreras asegura que no han sido notificados sobre ningún desalojo, y que, en ese caso, la escuela desaparecería, de cualquier modo. "Pero si quieren lo hacen, simplemente. Yo sólo pido terminar mi ciclo y ya despuès que pase lo que tenga que pasar. No tenemos posibilidad de oponernos a lo que dicten 'los de arriba'".

En Tlatilco, en cambio, los habitantes del campamento defienden su espacio, junto con los vecinos de las colonias aledañas, quienes tampoco desean el paso del tren suburbano por esa zona; argumentando que atrae congestionamiento, camiones y ambulantaje.

En tanto, fuentes de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes confirmaron que la puesta en marcha del Tren Suburbano es parte de un gran proyecto que se ampliaría durante el siguiente sexenio. Èsta primera etapa contempla la operación en la ruta hacia Cuautitlán, con 27 kilómetros de vía, y posteriormente se trabajarìa una segunda etapa del proyecto, que buscaría llegar hasta 242 kilómetros de vía que den mayores opciones de transporte del Distrito Federal hacia el Estado de México.

Para garantizar la continuidad de este proyecto, la SCT tiene firmado un convenio con los gobiernos federal, del Edomex y del DF, para lo cual, se lanzaría una nueva licitación.

Empero, mucho antes de la ampliación de este proyecto, que alcanzaría también la zona de San Bartolo, la desaparición de la escuela "Adolfo Lòpez Mateos", con el retiro de Jaime Contreras, será inminente. "No veo una soluciòn, porque no van a buscar mi sustitución. Además nadie va a querer cubrir esta plaza, porque es muy difìcil. Se requiere muchísima dedicación por muy poca remuneración", lamenta el maestro.

lunes, junio 19, 2006

Por una muerte digna: eutanasia.

Texto: Claudia Altamirano
Foto: Gerardo Vera
Elena entrelaza sus dedos y endurece la expresión al hablar de su madre. Se dispone a relatar su muerte, esforzándose por no llorar mientras deja de manifiesto su apoyo a la eutanasia: "Yo sí estoy a favor, por lo que recuerdo, la forma en como tuve que verla morir... la recuerdo muy mal y no hay necesidad de tenerlos sobreviviendo más tiempo en condiciones inhumanas", sentencia mientras se limpia una lágrima.

Maricarmen, su madre, padecía leucemia. Había sufrido varios infartos y una embolia, además de hipertensión y diabetes. Cualquier posibilidad de curación se complicaba ante un coctel de padecimientos que impedían intervenciones quirúrgicas. Sus familiares, más que cuidarla, parecían velarla. Postrada en una cama, inmóvil, con los párpados y mejillas hundidos; el respirador en la boca lleno de espuma, las manos hinchadas, los pies vendados; sin circulación y sin actividad renal, Mary pasó sus últimos días en estado vegetativo, inconsciente de quienes estaban a su alrededor, pero obligada a seguir respirando. "La situación era un tormento y era innecesario tenerla sufriendo así", lamenta Elena.

El enfermero que la cuidaba tomó la decisión. Tras consultar a sus hijos pero sin notificar al esposo, en un acto para él piadoso fue desconectando los aparatos que mantenían a Maricarmen con vida, hasta que la falta de oxígeno provocó finalmente su muerte.

La eutanasia es una práctica prohibida en México y casi en todo el mundo, al ser considerada por la ley como un homicidio punible. Sin embargo, la frecuencia con que se practica y la creciente demanda de los pacientes por una ley que les permita tener una muerte digna, voluntaria y sin dolor, urgen a revisar este tema.

El Código Penal Federal mexicano, en sus artículos 302 y 312, califica como homicida a todo aquel que prive de la vida a otro o, en su caso, lo induzca al suicidio. Por su parte, la religión la condena, la sociedad la evade y la ética médica la prohíbe, pero los pacientes demandan alternativas legales que respeten su derecho a decidir sobre su propia vida y muerte.

De acuerdo con Elías Moreno, presidente de la Comisión de Salud del Senado de la República, no existe una sola iniciativa en esa Cámara sobre el tema, pues ninguna fracción parlamentaria o comisión se "atreve" a plantearlo. "Creo que todavía nos falta mucho como país para llegar a esta situación; la idiosincrasia y el aspecto religioso no permiten siquiera discutirlo. Sería altamente cuestionado el plantearlo en el Congreso y los partidos no están dispuestos a asumir el costo", refirió.

El senador perredista y cardiólogo se manifestó de acuerdo con la práctica de la eutanasia: "He visto sufrir enormidades a enfermos que no debieron haber sufrido tanto, por lo tanto estoy totalmente de acuerdo con la eutanasia y el suicidio asistido", afirmó.

En tanto, el único recurso lícito con que cuentan los pacientes para terminar con su vida es la eutanasia pasiva, donde quien padece una enfermedad terminal decide dejar los tratamientos y en algunos casos el alimento, para acelerar el proceso de la muerte. Sin embargo, señala Elías Moreno, aun en esos casos el médico tiene la obligación de otorgarle el tratamiento al enfermo sin excepción alguna, incluso contra su voluntad. "El único criterio para retirarle un tratamiento es que ya no haya nada que hacer", indicó.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos, promulgada en 1948 por la Organización de las Naciones Unidas, establece en su artículo tercero el derecho a la vida, empero, garantiza asimismo, en su artículo quinto, el derecho a no ser sometido a tortura ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes. En este contexto, el senador Moreno señala que lo más conveniente sería la aprobación de una modalidad de la eutanasia conocida como "suicidio asistido", que consiste en que el paciente se aplique él mismo el método para terminar con su vida, bajo la supervisión y asistencia de un médico.

Controversia
En México el artículo 312 del Código Penal impide todavía el suicidio asistido, no así en otros lugares del mundo, donde está cobrando fuerza como una opción viable para abreviar el sufrimiento de un enfermo terminal. En los Países Bajos y en Oregon, Estados Unidos, los enfermos terminales ya tienen esa opción.

Holanda es el único país del mundo donde son permitidas, desde el año 2002, las dos formas de eutanasia: la activa, que consiste en provocar directamente la muerte, y la pasiva, que consiste en abandonar los tratamientos que prolonguen la vida.

En Oregon, la iniciativa para legislar la eutanasia fue presentada en 1991 en el Senado, cuyo rechazo motivó la creación de un comité ciudadano dedicado, exclusivamente, a promover el suicidio asistido bajo el nombre de "Acto de muerte digna".

El tema fue sometido a votación en dos ocasiones y fue hasta 1997 cuando, con 60 por ciento de votos en favor, finalmente se legalizó. Durante los primeros seis años a partir de su aprobación, se han llevado a cabo 171 suicidios asistidos en ese estado.

De acuerdo con la Euthanasia Research and Guidance Organization (ERGO), fundada por el periodista Derek Humphrey y localizada en Oregon, uno de los procedimientos más recurridos es, después de la inyección letal, la llamada "bolsa de salida". Se trata de una bolsa especial que el paciente debe colocar en su cabeza y conectarla a un tanque de helio. El sitio web de ERGO ofrece un video instructivo para utilizar correctamente la bolsa, a fin de provocar al enfermo la muerte en menos de 5 minutos. Sin embargo, algunos testimonios incluidos en el mismo sitio web relatan las fallas de este método, que han provocado severos daños físicos y mentales a quienes no logran su cometido.

Dejarse morir
Alberto decidió abandonar su vida. Renunció a su empleo en una importante empresa de cuentas crediticias, relegó paulatinamente a sus amistades y se condenó a pasar el último año de su vida encerrado en su habitación; dejándose consumir por el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH). Su madre lo condenaba por sus preferencias sexuales y lo culpaba por haberse infectado. Sin el apoyo familiar, con la culpa sobre sus hombros y con el creciente temor de ser visto con un físico cada vez más deteriorado, Alberto simplemente se negó a luchar por su vida. Se dejó morir.

La eutanasia pasiva es una práctica común en el proceso de duelo por el que pasan los enfermos terminales y sus familias. El fin de un dolor insufrible, la imposibilidad de costear un tratamiento para prolongar la vida o la simple intención de no causar penas y molestias a sus seres queridos, orillan a quienes han sido desahuciados a dejar de luchar por una vida que, de cualquier modo, terminaría en el corto plazo. Dejar de tomar alimento o sus medicamentos es la forma en como estas personas eximen a sus familias y a sí mismos, del proceso de una muerte larga, lenta y dolorosa.

De acuerdo con el doctor Luis Gómez, traumatólogo y catedrático del Instituto Mexicano de Tanatología, la eutanasia pasiva es una renuncia a la prolongación artificial de la vida dentro de un proceso de fallecimiento, a través de la abstención terapéutica. "Se le retira el tratamiento y sólo se le dan soluciones para evitar el dolor, pero lo que más necesita esa persona en ese momento es atención y amor", puntualizó.

Gómez sostiene que la obligación ética y profesional de preservar la vida suele llevar a los médicos a un ensañamiento terapéutico, donde el galeno lleva a cabo cualquier medida para tratar de mantener la vida del paciente, incluso maniobras de resucitación; aun cuando esto le cause mayor sufrimiento o le haga vivir a él y su familia una situación moralmente insoportable.

La demanda por una regulación legal en esta materia tuvo un fruto importante en Francia en noviembre pasado, cuando las presiones de las organizaciones proeutanasia, unidas a numerosas misivas dirigidas al presidente Jacques Chirac, en las que le solicitaban autorización para terminar con una vida imposible, orillaron al Congreso francés a aprobar la eutanasia pasiva, dejando la activa y con ella el suicidio asistido como prácticas fuera de la ley. La sociedad exigió a la Asamblea Nacional una alternativa para los enfermos terminales, tomando como argumento los 150 mil pacientes que cada año deciden llevar a cabo la eutanasia, aun siendo ilegal.

No es igual en España, donde pese a las constantes peticiones de organizaciones sociales por una legislación en esta materia, tampoco ha sido aprobada la eutanasia y sus variantes. Uno de los reclamos más enérgicos proviene de la Asociación Derecho a Morir Dignamente, cuyo icono es Ramón Sampedro, un gallego que, en 1998, ingirió una dosis de cianuro para terminar con el suplicio de casi 30 años de tetraplejia.

Pese a haber solicitado permiso a su gobierno por 25 años para acabar con su vida legalmente, éste le negó esa posibilidad y persigue, hoy, a quienes asistieron a Sampedro en su suicidio.
Este caso inspiró al cineasta español Alejandro Amenábar, quien plasmó la vida de Sampedro en el filme Mar adentro , cuya exhibición ha reanimado el debate sobre el derecho a morir dignamente. En una carta escrita antes de morir y dirigida a los jueces de su caso, el gallego sentenció: "No es que mi conciencia se halle atrapada en la deformidad de mi cuerpo atrofiado e inservible, sino en la deformidad, atrofia e insensibilidad de vuestras conciencias".

Amor a la vida
A pesar de que las enfermedades terminales figuran entre las 10 principales causas de muerte en México, no todos los pacientes desahuciados han perdido el ánimo y la voluntad de vivir. El médico radiólogo René García Félix, quien es seropositivo, fundó en 1988 la casa Albergues de México, con el objetivo de brindar un lugar de reposo y recreación a personas que padecen el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (sida).

La Ermita, como le llama René al albergue ubicado en los alrededores del Ajusco, cuenta con médicos, tanatólogos y sicólogos voluntarios que brindan apoyo a los pacientes, quienes pueden alojarse sin ningún costo o visitarlo cuando lo requieran. Son provistos de medicamentos y alimentos, además de proporcionarles un trato fraternal y cálido, que les permita disfrutar con calidad el tiempo que les reste de vida.

El requisito más importante para poder ingresar a Albergues de México es la voluntad del paciente para hacerlo. "Nosotros no aceptamos a nadie contra su propia voluntad, cuando el familiar viene y los `tira` el verbo tirar es el más claro y específico en ese caso los rechazamos. Nosotros no estamos para solucionar problemas familiares ni aceptamos que traigan a nadie a aislarlo como un castigo por haberse infectado", señala.

Asimismo, René García asegura que, pese a que algunos enfermos le han solicitado ayuda para adelantar su muerte, en la Ermita no se practica la eutanasia activa, sino sólo la pasiva; donde, si algún paciente solicita que le sea retirado su tratamiento o ya no desea comer para adelantar su muerte, se respeta su voluntad, "pero no ayudamos a nadie a morir".

En su propio caso, René afirma que su enfermedad no ha limitado su voluntad de vivir ni su calidad de vida, sino que por el contrario, a raíz del fatal diagnóstico, ha dado otro valor a las cosas y personas que hay dentro de ella. Mirando el vasto campo de la Ermita y sonriendo, René exclama: "Estoy condenado a muerte, pero no estoy a favor de la eutanasia activa; yo amo la vida y quiero vivirla hasta mi último minuto".